domingo, 9 de noviembre de 2025

La adopción , un camino elegido.

Antes de todo: que  nadíe se me enfade por utilizar el simil de mi escoba para este post, que lo escrito desde el respeto, bien parece.

Ahora si, empezamos:

Cuando hace años adopté a mi escoba, fue una decisión muy pensada ya que yo sabía que no solo cambiaria la vida de mi escoba, cambiaria también la mía.

Decidí abrir mi hogar y mi corazón. Decidí compartir con mi escoba el resto de mi vida.

La adopción no fue un cuento de hadas, sino una aventura real, con sus desafíos y sus recompensas, donde cada paso fue un acto de valentía y un testimonio de amor inquebrantable entre mi escoba y yo.

Ahora dejo de lado mi escoba pero sigo hablando de la adopción:

La llegada de un hijo o hija adoptados es el inicio de una nueva historia. Es aprender a construir, día a día, un vínculo de confianza. Es aceptar que el amor se manifiesta de muchas formas y que la conexión no siempre nace de la sangre, sino de la elección consciente de cuidar, proteger y amar sin reservas, como si hubiera nacido de tus tripas.

Le he pedido a mi escoba se lea el boletín de datos provisional de medidas de protección a la infancia publicado por el Ministerio de Juventud e Infancia de España (a través del Observatorio de la Infancia) el 31 de diciembre de 2023, y nos cuente en qué punto anda nuestra sociedad respecto a este tema.

Esto es lo que mi escoba ha encontrado:

El número de adopciones en España sigue lejos de las cifras registradas hace una década, cuando más de un millar de niños y niñas eran adoptados en procesos internacionales.


En 2023, pese a que había más de 2.400 familias nuevas dispuestas a incluir a los menores en sus hogares, se adoptaron 747 niños: 555 en procesos nacionales y otros 192, procedentes de otros países. 

El Ministerio achaca el descenso de adopciones internacionales de los últimos años a la pandemia mundial por la COVID-19. (¿La sombra del COVID no se va a ir nunca?)

Según explica, en 2022 muchos países cerraron sus departamentos de adopción, no realizando asignaciones y, además, cerrando la posibilidad a las familias de viajar para asistir a los juicios de adopción.

En 2023, el número de nuevos ofrecimientos se mantuvo en cifras similares, 748 familias declaradas idóneas para la adopción siguen pendientes de asignación.

Por comunidades, las que más adopciones internacionales formalizaron, son Cataluña y Madrid y las comunidades que registran un mayor número de familias dispuestas a adoptar son: Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana.

Andalucía es la comunidad con mayor número de adopciones nacionales con un total de 23%, seguida de la Comunidad Valenciana y Cataluña con el 13,8% y 10,8% respectivamente.

Según la procedencia del niño o niña, Vietnam ocupa el primer lugar, como en años anteriores, seguido de La India, Hungría y Colombia.

Respecto a China, el boletín destaca que en 2022 no se constituyó ninguna adopción y en 2023 se han realizado cuatro. Asia es el continente más demandado, a gran distancia de América, en segundo lugar.

A lo largo del año 2023, 1.816 familias nuevas se ofrecieron para ese proceso y 1.305 familias fueron declaradas idóneas y están pendientes de asignación.

El número de menores propuestos para adopción nacional ese año fue de 635, según el informe. Durante el 2023 se contabilizaron 555 adopciones frente a las 681 comunicadas en el año 2022. De ellas, la mitad, corresponden a menores de hasta tres años.

Las adopciones de adolescentes entre los 11 y 17 años se sitúa a la cola, con apenas 64, de ellas 40 corresponden a preadolescentes entre 11 y 14 años.

El siguiente grupo más afectado es el de menores con discapacidad. Se concretaron 24 adopciones, las mismas que las del grupo de 15 a 17.

Y en todas toooooooodas ellas se destaca la importancia del acompañamiento profesional ya que es fundamental el apoyo psicológico y social continuo, tanto para los niños como para las familias adoptivas, para afrontar los procesos de adaptación, el manejo de la identidad y la integración de las historias previas del niño o la niña.

La adopción es una construcción, un proyecto vital que exige paciencia, empatía. Es reconocer la dignidad de cada historia y la promesa de un futuro donde cada niño y niña tenga un lugar seguro y un amor que lo sostenga.

Vaya desde mi humilde blog mi respeto a todas las familias que han adoptado o que están en dispuestas a hacerlo. Gracias por asegurar un futuro a personas que lo tenían en el aire...

Os dejo una canción de Manuel Carrasco que me gusta mucho para cerrar este post.

https://www.youtube.com/watch?v=jqDEKHwpOJ0


 

viernes, 24 de octubre de 2025

España Lidera la Pobreza Infantil de Europa. ¿En qué andamos?

Mi escoba y yo vivimos en un barrio donde la gente más o menos, tiene para vivir, ir de vacaciones y salir a cenar algún finde.

En nuestro barrio todos nos conocemos, los que llevamos toda la vida y los nuevos vecinos. En el piso de abajo, vive Andrés.

Adres es un crio de unos 9 años que vino con su madre el año pasado. Es un niño simpático, alegre y educado aunque mi escoba y yo cada día le vemos más triste y más flaco.   

Un viernes por la tarde mi escoba, Andrés y yo estábamos sentados en un banco del parque (Andrés se hizo amigo nuestro porque le gusta mucho estar con nuestra perrita Bimba).

Andrés dice que los animales son mejores que algunas personas...

Mientras veíamos a los chicos y chicas que salían del cole que hay enfrente de casa, a Andrés se le iban los ojos detrás de las ropas y de las zapatillas de los niños y las niñas. Miraba sus mochilas y les escuchaba hablar de sus planes del fin de semana.

Después de mucho rato, Andrés con sus pocos 9 años nos decía que ese día no había comido y que él no entendía de políticas ni de estadísticas pero que sabía que su futuro era como una calle sin salida, oscura y desigual, mientras que el futuro de los demás niños eran avenidas llenas de luz. 

Nos contó que su padre se había marchado y que echaba de menos a su abuela que cocinaba como nadie.

Nos contaba que su madre le dejaba la cena hecha y muchas noches no volvía a casa. 

Mi escoba y yo nos mirabamos y no deciamos nada. Chiton. Las dos calladas como puertas. 

Somos majas pero poco decididas y como somos un poco cobardes, desviamos el tema hablando de lo majos que eran los perros del parque y diciendo que no se preocupara que seguro que todo mejoraría… Madre mía que ridículas somos.

En fin, La historia Andrés es la historia silenciosa de millones de familias y de  niños en este país nuestro. Es la historia de un país que, a pesar de ser la cuarta economía de la Unión Europea, arrastra una sombra larga de desigualdad que recae con mayor peso sobre los más pequeños.

Los Datos que Duelen: La Desigualdad en Cifras Españolas

La historia de Andrés aterriza en la cruda realidad de los datos sociales en España, los cuales reflejan un desafío estructural que persiste por encima de la media europea:

Liderazgo en Pobreza Infantil: España ostenta la tasa de pobreza infantil más alta de la Unión Europea. Según informes de UNICEF y el Estado de la Pobreza, cerca del 28-30% de los niños, niñas y adolescentes se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social. Esto se traduce en aproximadamente 2.3 millones de menores que viven con serias carencias.

Riesgo de Pobreza y Exclusión (AROPE): En general, España es el cuarto estado de la UE con mayor porcentaje de personas en riesgo de pobreza y exclusión social (tasa AROPE). Casi 13 millones de personas (cerca del 25.8% de la población) se mantienen en esta situación.

Pobreza Severa: La situación más extrema afecta a más de 4 millones de personas que sufren pobreza severa, sobreviviendo con menos de 644 euros al mes por unidad de consumo.

Desigualdad: El coeficiente de Gini, que mide la desigualdad de ingresos, se mantiene en niveles altos (alrededor de 31.2), lo que subraya que las rentas se distribuyen de manera muy dispar.

Estos datos demuestran que, si bien hay avances puntuales, la desigualdad y la pobreza estructural en España se ceban especialmente con la infancia, condenando a una parte de la población a enfrentar barreras desde el inicio de sus vidas.

Un Llamado a la Acción y la Reflexión

Y ya para terminar, mi escoba y yo, os proponemos un spot de Save The Children muy muy ilustrativo:

https://www.youtube.com/watch?v=0gEXjx13ZsM

Sensibilicémonos y sensibilicemos porfa…

sábado, 18 de octubre de 2025

Crítica a la mirada de la sociedad hacia la parálisis cerebral — Sol y dignidad.


Como a todos independientemente de que sufra parálisis cerebral y lleve 17 años soportando en su nuca la mirada condescendiente de la sociedad, cuando a las mediodías sale el sol de enero, Elvira te mira de una forma tan especial que sabes que se muere por ir a la calle a tomar el sol.
Es entonces cuando mi escoba y yo cogemos nuestros trastos y nos vamos con ella, buscamos un banco y nos aposentamos un buen rato hasta  que “alguien” se acerca y me dice delante de Elvira:



-Pobrecita ¿es tu hija?

Y yo le contesto -  no, es mi amiga-

-Ya,  que pena.

- Que pena qué. Contesto yo.

- Que pena vivir así.

- Así como ¿sentada? Pues más descansada estará digo yo ¿verdad Elvira?

Y ante la mirada extrañada y sorprendida de quien se ha acercado, Elvira utiliza su plafón para decirnos que está muy a gusto sentada pero que tumbada todavía estaría más descansadita…(es una cachonda) y nos echamos unas risas junto al “alguien” que se nos ha acercado.

-          -  ¿Nos escucha? Pregunta “el alguien” sorprendido.

Y entonces yo me pongo muy seria y contesto:


-          - Elvira tiene parálisis cerebral, sufre un trastorno permanente y no progresivo que afecta a  su psicomotricidad, o sea a su aparato motor pero  su cerebro está perfecto. 
       Nos oye, nos entiende y se acuerda de todos nosotros cuando hablamos de ella y de su parálisis con ella delante sin tener en cuenta precisamente eso,  que está delante…

-          - Vaya, lo siento. No quería ofender.

Y entonces “el alguien” se acerca mucho a Elvira, le sonríe  y comienza a preguntarle en voz muy alta y de forma muy lenta:

-          - Elvira  ¿Qué tal estas? ¿te duele mucho?

Y  es entonces cuando mi escoba no puede más y empieza a barrer las losetas del parque (porque o barre o se lía a escobazos con el “alguien” pelma que nos ha tocado).

-         -  Elvira oye perfectamente, no hace falta que le grites- le digo.

-          - Claro, claro. Perdonad.

Jeeesus pero por qué cada vez que salimos a la calle no podemos tener el rato tranquilito…


Yo agradezco que la gente se acerque a hablar con Elvira y a saludarle. De hecho Elvira es supersociable y extrovertida así que  le encanta hacer amigos nuevos pero claro, siempre que dejen atrás las penas y los lamentos.


Dicen los estudios (principalmente la Encuesta de Discapacidad, Autonomía Personal y Situaciones de Dependencia - EDAD 2020 del INE, y datos publicados hasta abril de 2024) que la incidencia anual de parálisis cerebral se mantiene entre 2 y 2,5 por cada 1.000 nacimientos vivos en países desarrollados, incluyendo España.

Tambien dicen que el número total de personas con discapacidad en España, de 6 o más años y residentes en hogares, asciende a 4,32 millones, lo que representa aproximadamente el 9,7% de la población total.

Además, el INE ha publicado datos correspondientes a la población residente en centros (residencias, centros de discapacidad, etc.) en 2023, donde 357.894 personas afirmaron tener alguna discapacidad, siendo las más frecuentes las relacionadas con el cuidado personal, la vida doméstica y la movilidad.

En lo que respecta a la parálisis cerebral, el número de personas afectadas en España se mantiene en una estimación de unas 120.000 personas (según la Confederación ASPACE). Ahí es nada.


Bueno pues mi amiga Elvira es una de esos 120.000 y Lleva 17 años luchando contra los elementos, contra sus limitaciones, la autocompasión y la mirada compasiva, contra la adversidad, contra las trabas que nuestra sociedad  para “normales” le impone y aun así, si le cuentas un buen chiste, la tía se troncha. 
Le gusta el solecito, el cafecito,  las tapitas del bar y una buena película con sus palomitas…como a ti, y como a mí.

Siempre que salgo con ella vuelvo con una lección de vida aprendida. Elvira es la imagen de la superación y el coraje. Por eso me da tanta rabia que mucha gente se le acerque por pena y no porque crea que pueda ser una persona interesante para conocer y disfrutar.

Vivimos en  una sociedad que tanto la muerte como la enfermedad “cuanto más lejos mejor”. No nos han enseñado a mirarlas de una forma natural aunque de sobra sepamos que tanto la una como la otra en algún momento debemos mirarlas de frente e incluso pasar por ellas.


La verdad es que Elvira tiene una incapacidad únicamente motora  pero en muchos otros paralíticos cerebrales además del trastorno motor  también se da  Retraso mental - en dos terceras partes de los afectados- así como problemas de aprendizaje, alteraciones visuales, déficit auditivos, trastornos de la comunicación, trastornos emocionales o conductuales, alteraciones en la deglución… En fin que  la cosa se les complica y son necesarias muchas manos y muchos recursos para darles la calidad de vida a la que tienen derecho como ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho que son.


Desde nuestro blog mi escoba y yo os animamos a que visitéis algunas páginas que os darán información acerca de esta discapacidad motórica y también os animamos a que os acerquéis a alguna de sus asociaciones…si os acercáis, fijo que repetís  ¡estos chicos enganchan, os lo aseguro!

Y ahora os dejo porque mi escoba, Elvira y yo nos vamos a las rebajas. Elvira es, sin duda, la más presumida de las tres y nos puede tener tooooda la tarde recorriendo tiendas.

En fin, hasta otra. 

Os dejo con varias paginas muy recomendables y oficiales por si queréis seguir cuscuseando...

https://aspace.org/que-es



y como broche final cierro esta crítica a la mirada de la sociedad con este corto animado. Nos recuerda que las barreras no están en el cuerpo, sino en los ojos de quien mira y en la falta de empatía para tender un puente."





domingo, 12 de octubre de 2025

¿Un hogar o un campo de batalla?

Mi escoba y yo queremos barrer el rincón de unos recursos esenciales que están al borde del colapso, afectando a la infancia más vulnerable. Esos recursos son los centros de menores. 

La situación más grave y absolutamente denunciable es la violencia e inseguridad extrema que las personas educadoras, integradoras y trabajadoras sociales estás sufriendo en los pisos tutelados y centros de acogida de menores y jóvenes en riesgo. 
Estos centros están diseñados, en teoría, para ser espacios de protección, recuperación y oportunidades.¿Perdonaaaaaaa? 

Su objetivo (tururu) es ofrecer una segunda oportunidad y un crecimiento sano y seguro a jóvenes que han sufrido abandono, maltrato y negligencia familiar. 
Sin embargo, lo que reflejan las denuncias de los profesionales es una realidad muy diferente y a la que no se le está haciendo caso por parte de las instituciones. 
Bueno, como no se le está haciendo caso a tantas y tantas cosas...

Estos son algunos de los puntos más destacados del análisis que hacen los y las educadoras de los centros. 

 Agresiones Diarias e Impunidad: el personal educador está viviendo constantemente bajo el miedo de la violencia física y psicológica, pero lo más grave es la sensación de “aquí no pasa nada” que acompaña a estas agresiones. 
Miren ustedes, hasta dónde yo sé, sufrir violencia no debe ser parte de ningún trabajo ni creo que esté dentro de las funciones de nadie.
Sufrir violencia en cualquiera de sus formas, es una vulneración inaceptable del derecho a la seguridad y la integridad física de los y las trabajadoras, creando un ambiente de miedo paralizante que mina la capacidad de ejercer la labor, nada menos de acompañamiento a personas jóvenes que emocionalmente están rotas y no entienden que pintan en esta sociedad. 

La Fragilidad del Sistema: el asesinato de la compañera de Badajoz el pasado marzo a manos de jóvenes tutelados, pone de manifiesto que los protocolos están fallando. 
¿Cómo podemos esperar que las personas educadoras trabajen en un entorno terapéutico si no se les garantiza que volverán a casa sanos?, ¿si son ellos los que necesitan terapia para soportar las jornadas laborales? 

La "Puta Guerra" y la Fatiga de la Empatía: Los propios profesionales describen su trabajo cotidiano como una situación de guerra o una olla a presión. 
Estas quejas evidencian la falta de personal, de protocolos de seguridad eficaces y de recursos especializados para abordar el profundo trauma y las necesidades de salud mental complejas que presentan muchos de estos y estas jóvenes. 

Las personas que trabajan en centros con menores saben que los y las jóvenes que llegan a estos centros son muy vulnerables y arrastran secuelas emocionales muy graves. 
Si el entorno que debe sanar, ofrecer estabilidad y enseñar el respeto a las normas es, en sí mismo, un foco de conflicto, violencia y miedo, su camino hacia la integración se vuelve casi imposible. 

Estamos fallando a quienes deberíamos proteger, revictimizándolos al confirmarles que incluso la "protección" oficial es un lugar inseguro y la violencia aprendida, se reproduce en el centro. Sin que ocurra nada.

El trabajo de integración, educación y acompañamiento solo puede llevarse a cabo en un entorno seguro, con supervisión clínica y apoyo administrativo adecuado. 

Al no garantizar la seguridad de los educadores, el sistema los condena a la frustración, al agotamiento y lo que es peor, a tener que centrar su trabajo en la contención física en lugar de en la educación y la terapia.

Se les exige ser "superhéroes" sin herramientas. 

Además, y como está requeteclaro, la financiación y la dotación de estos centros no es una prioridad electoral. 
(Ni lo será)

Este abandono económico se traduce en la escasez de terapeutas, psiquiatras y mediadores especializados, dejando a los y las educadoras de base solas para gestionar crisis que exceden con mucho su formación y capacidad. 

La inversión en estos centros significa invertir en la prevención de la delincuencia y en un futuro mejor para todos pero actualmente, esa inversión es clarisisiissimamente insuficiente. 

Desde aquí mi escoba y yo, hacemos un llamamiento urgente a las administraciones (que nadie nos van a escuchar pero que no sea porque no lo intentamos): 

Señores de los gobiernos, dejen de hacer el idiota jugando al "tú más" y estén a lo que importa, que este pais se nos va a la mierda.

Se necesita más personal, más formación en gestión de crisis  y una inversión real para que estos lugares sean espacios de confianza y esperanza, no de grima y miedo.

La seguridad de nuestros y nuestras educadoras es la seguridad de nuestro futuro social, y la única forma de romper el ciclo de la violencia. 

He dicho.

Os dejo el enlace a un video donde Victor Nieto nos cuenta qué es un centro de menores y sus tipos.
¡Muy recomendable!